Como hemos mencionado en anteriores artículos, actualmente, existen numerosos conceptos desconocidos para muchas personas. Concretamente, desde Asesoría Arribas queremos comentar en este artículo cuales son las principales diferencias entre los términos de separación y divorcio. Para ello, comentaremos previamente en qué consisten cada uno de los conceptos mencionados en este artículo.
¿Qué es una separación?
Antes de comentar cuáles son las diferencias más importantes entre la separación y el divorcio, consideramos necesario explicar cada uno de los términos. Por ello, empezaremos este artículo comentando que es la separación legal.
De esta manera, la separación hace referencia a la decisión por parte de los cónyuges de poner fin a la convivencia y la vida matrimonial en común. Tal y como hemos comentando, a continuación, cuando se lleva a cabo una separación matrimonial es importante mencionar que el vínculo legal del matrimonio, seguirá vigente a efectos legales. De esta manera, la separación implica que la pareja puede reconciliarse o bien, llevar a cabo el divorcio definitivo.
¿Qué es un divorcio?
En cuanto al divorcio, se hace referencia al proceso que se realiza para llevar a cabo la disolución total de un matrimonio y por lo tanto, poner fin a la unión conyugal que une a dos personas.
Actualmente, se puede llevar a cabo un divorcio si uno de los miembros de la pareja quiere finalizar la relación de forma definitiva y por lo tanto, iniciar el proceso de divorcio. Aún así, será necesario también llevar a cabo un acuerdo mutuo o a través de la vía judicial para establecer algunos términos relacionados con la custodia en el caso de que sea necesario o cualquier otro aspecto.
Diferencias entre separación y divorcio
A Pesar de que estos dos conceptos comparten alguna similitud, es importante destacar que existen también numerosas desemejanzas. A continuación, comentaremos las principales diferencias entre lo que es una separación y un divorcio.
Extinción del matrimonio
La primera diferencia que queremos mencionar es también una de las más importantes y ésta, hace referencia al vínculo que implica la separación o el divorcio. Es decir, mediante el divorcio, se pone fin al matrimonio y por lo tanto, se disuelve el vínculo matrimonial. En el caso de la separación, únicamente implica que finaliza el cese de la convivencia y la vida que realizaban los cónyuges.
Otros matrimonios
En relación al primer punto sobre la extinción del matrimonio, es importante comentar también las diferencias en cuanto a la posibilidad de volver a contraer de nuevo matrimonio. Como hemos mencionado, el divorcio conlleva la disolución del vínculo legal entre dos personas por lo que éstas, pueden volver a contraer matrimonio si lo desean. En cambio, en el caso de que la pareja lleve a cabo una separación, no podrán volver a casarse ya que legalmente existe la vinculación del matrimonio.
Disolución total o parcial
Otra de las diferencias más significativas está directamente relacionada con el proceso y su reversibilidad. El proceso del divorcio conlleva una disolución total y por lo tanto, irreversible en el caso de que haya una posibilidad de reconciliación. Si esto sucede, la única posibilidad y la única opción legal sería contraer matrimonio de nuevo. En cuanto a la separación, como no se extingue el vínculo legal que une a dos cónyuges, en el caso de que haya una reconciliación, la pareja seguiría estando legalmente unida.
No son consecuentes
Finalmente, queremos destacar que son procesos totalmente independientes y que por lo tanto, llevar a cabo una separación no implica ni conlleva a un posterior divorcio. A pesar de que normalmente cuando se produce un divorcio se produce también una separación, es importante comentar que no necesariamente tiene que ser así.