Introducción
La Seguridad Social es un sistema creado para proteger a las personas y sus familias ante situaciones de riesgo tales como enfermedades, accidentes laborales, jubilación, entre otras. Las prestaciones contributivas son aquellos beneficios económicos que se otorgan a las personas que han cotizado y cumplido con los requerimientos necesarios para acceder a ellos.
Tipos de prestaciones contributivas
Jubilación
La jubilación es una de las prestaciones contributivas más conocidas. Esta se otorga a las personas que han llegado a la edad de retiro y han cotizado el número de años necesarios para acceder a ella. La pensión de jubilación puede ser parcial o total, dependiendo del número de años cotizados y otros factores que pueden influir.
Incapacidad
La incapacidad es otra de las prestaciones contributivas de la Seguridad Social. Esta se otorga a las personas que han sufrido una lesión o enfermedad que les impide trabajar, ya sea temporal o definitivamente. La pensión por incapacidad se otorga después de un proceso médico y gestiones administrativas necesarias.
Viudedad y Orfandad
La prestación por viudedad se otorga a la cónyuge o pareja de hecho de una persona fallecida que ha cotizado y cumplido con los requisitos necesarios para acceder a ella. En caso de que la persona fallecida tenga hijos menores de edad, estos podrían ser beneficiarios de la prestación por orfandad, siempre y cuando cumplan con los requisitos necesarios.
Requisitos para acceder a las prestaciones contributivas
Para acceder a las prestaciones contributivas de la Seguridad Social, es necesario haber cotizado un número de años mínimo en el sistema. Además, dependiendo del tipo de prestación, pueden haber otros requisitos como la edad, la situación familiar, el porcentaje de discapacidad, entre otros.
Conclusión
Las prestaciones contributivas de la Seguridad Social son un importante apoyo económico para las personas y sus familias en momentos de necesidad. Es importante conocer los tipos de prestaciones y los requisitos necesarios para acceder a ellas, y tener en cuenta que es necesario cotizar para poder beneficiarse de ellas. La Seguridad Social es una herramienta fundamental para garantizar una sociedad más justa y equitativa.