Introducción
Los contribuyentes suelen tener la idea errónea de que todo gasto que realizan en el año tiene la posibilidad de ser deducido de su declaración de impuestos. Sin embargo, existen ciertos gastos que nunca podrán ser deducidos.
Gastos personales
Uno de los principales grupos de gastos que no son deducibles de impuestos son los gastos personales. Estos incluyen los gastos de la vida diaria, como la ropa, los alimentos y los gastos de entretenimiento. No importa cuánto se gaste en estos elementos, nunca podrán ser incluidos en una declaración de impuestos.
Gastos no relacionados con el trabajo
Los gastos que no están relacionados con el trabajo son otros que no pueden ser deducidos. Por ejemplo, si un contribuyente se va de vacaciones y pretende declarar los gastos de su viaje, no podrá hacerlo. Lo mismo ocurre con los gastos de inmuebles no destinados a la actividad económica y los gastos de vehículos para uso personal.
Gastos ilegales
Otro gran grupo de gastos que nunca podrán ser deducidos son los gastos ilegales. Esto incluye el dinero que se paga para obtener un soborno, la parte de una multa de tráfico que se paga para evitar aparecer en un registro penal, o los gastos relacionados con actividades delictivas. No se puede deducir nada que esté relacionado con actividades ilegales.
Conclusión
Es importante tener en cuenta que no todos los gastos se permiten en las declaraciones de impuestos y que hay ciertos tipos que no podrán ser deducidos. Si tienes dudas sobre un gasto en específico, siempre es recomendable consultar con un experto en materia fiscal. Si bien puede ser tentador tratar de incluir todos nuestros gastos en nuestra declaración de impuestos, no hacerlo de manera correcta puede significar problemas legales en el futuro.