En el artículo de hoy queremos hablar sobre la Ley de la Segunda Oportunidad (LSO), ésta, es desconocida para muchas personas a pesar de que cada vez está adquiriendo más importancia. Desde Asesoría Arribas, queremos explicar a continuación qué es la Ley de la Segunda Oportunidad, cómo funciona y cuales son los requisitos que se deben cumplir para poder acogerse a esta ley.
¿Qué es la Ley de la Segunda de Oportunidad?
La Ley de la Segunda Oportunidad se aprobó en España en el año 2015 con el objetivo de exonerar deudas. Es decir, a través de la LSO lo que se pretende es poner a disposición de particulares y autónomos una herramienta para ayudarles en situaciones económicas complicadas. De esta manera, se puede considerar que la Ley de la Segunda Oportunidad es un proceso administrativo que permite a las personas poder cancelar sus deudas contraídas.
Es importante mencionar también que a través de este tipo de leyes lo que se pretende es garantizar también el cobro de los acreedores por lo que se considera que es una ley que cumple dos funciones muy importantes, la efectividad del cobro y proteger a particulares y autónomos de malas situaciones económicas.
Funcionamiento de la Ley de la Segunda de Oportunidad
Cuando una persona no puede asumir sus deudas y cumple los requisitos que esta ley exige, tendrá la posibilidad de llevar a cabo un Acuerdo Extrajudicial de Pagos (AEP). A través de este, lo que se pretende es obtener información sobre la deudas con el objetivo de poder estructuras, negociar y poder efectuar su pago.
Si este proceso no se puede llevar a cabo, se deberá realizar mediante el procedimiento concursal durante el cual se podrá solicitar también el Beneficios de Exoneración del Pasivo Insatisfecho (BEPI), éste, permite poder cancelar todas las deudas que no se pueden pagar.
¿Quién puede acogerse a la Ley de la Segunda de Oportunidad?
Como hemos mencionado anteriormente a lo largo de este artículo, pueden recurrir a LSO las personas físicas, tanto particulares como autónomos que no puedan asumir sus deudas debido a su situación económica.
Aún así, es necesario comentar también que existen una serie de requisitos que deberán cumplir las personas que quieran acogerse a la Ley 25/2015 de 28 de Julio, de la Segunda Oportunidad.
Requisitos de la Segunda de Oportunidad
A continuación, comentaremos en el siguiente apartado cuáles son los requisitos más importantes a tener en cuenta.
Acreditar que la persona no puede hacer frente sus deudas
Uno de los requisitos más importantes es que la persona que solicite la LSO deberá demostrar y acreditar que ha liquidado todo el patrimonio y se ha llevado a cabo el pago de todo lo posible a los deudores.
De esta manera, será necesario que el beneficiado de la Ley de la Segunda Oportunidad deberá demostrar que no puede afrontar sus deudas ya que no dispone ni de activos ni de dinero suficiente.
Total de las deudas
Otro de los requisitos a tener en cuenta para que una persona, tanto particular como autónoma, pueda solicitar esta ley es que las deudas totales no superen los 5 millones de euros.
Buena fue del deudor
Finalmente, se deberá acreditar que el deudor ha actuado de buena fe y para ello, se deben tener en cuenta una serie de consideraciones para saber la buena fe del deudor:
- Se considera que un deudor ha actuado de buena fe cuando antes de iniciar el proceso que ofrece la LSO, ha intentando llegar a un acuerdo con los acreedores.
- No se ha acogido a la Ley de la Segunda Oportunidad en los últimos 10 años.
- No ha generado su situación de insolvencia de manera voluntaria con el objetivo de poder acogerse a esta Ley.
- No ha cometido ningún tipo de delito socioeconómico, patrimonial o de falsedad de documentos en los últimos 10 años.
- No ha rechazado ninguna oferta de trabajo considerada adecuada teniendo en cuenta sus capacidades.